Yo te amo como amo a los patos de aquel día, podría comprar un ladrillo por cada día que te espero y terminar un castillo completo si es necesario, pero... no sé si todo lo que estoy haciendo vale la pena, quiero decir... algún día vas a volver? no lo creo, y como no lo creo no estoy seguro de que tenga que seguir esperando, ya que hay muchos peces en el mar, como dijiste, pero... yo quiero a ese pez, desde que se pobló este océano, pero te vas, y cada día te siento más lejos, tendré que dejar de nadar atrás tuyo y tirar mi caña? no estoy seguro, porque no quiero, te olvidaría y fuiste una de las cosas más lindas que me paso, y no me resigno a que no me pase más...
Sin embargo, es espejo a la mañana me dice...

Ya está Agustín! no va a volver!

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